La fructosa qué debes saber

La fructosa, qué debes saber

frutas tropicalesLa fructosa, qué debes saber

En Unika Gestión de Marcas, sabemos que es esencial conocer los ingredientes de los productos destinados a consumo, y uno de los más interesantes es la fructosa. Es un tipo de azúcar natural que se encuentra en frutas, miel y vegetales. Es más dulce que el azúcar de mesa común (sacarosa) y se utiliza en una variedad de alimentos procesados como edulcorante. 

Pero, aunque la fructosa es una forma natural de azúcar, consumirla en exceso puede tener efectos negativos en la salud. En pequeñas cantidades, es segura y puede incluso proporcionar algunos beneficios para la salud. Por ejemplo, se ha demostrado que el consumo de frutas y verduras que contienen fructosa reduce el riesgo de enfermedades crónicas, como son las cardíacas o la diabetes. 

Además, la fructosa es usada por el cuerpo de manera diferente al azúcar de mesa. Mientras que la sacarosa se descompone en partes iguales de glucosa y fructosa en el cuerpo, la fructosa se metaboliza en el hígado y no eleva los niveles de glucosa en sangre tan rápidamente.

 

Sin embargo, como hemos dicho, el consumo excesivo puede tener efectos negativos en la salud. La fructosa se encuentra en muchos alimentos procesados, como refrescos, zumos, dulces y alimentos con alto contenido de jarabe de maíz con alta fructosa (HFCS). 

De hecho, el exceso en la dieta se ha relacionado con un mayor riesgo de obesidad, enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y síndrome metabólico. Estos efectos negativos son en gran parte el resultado de la ingesta excesiva de calorías de alimentos procesados. 

Consumo excesivo 

Además, su consumo excesivo puede tener efectos negativos en el hígado. Cuando el hígado metaboliza la fructosa, se convierte en grasa. El exceso de grasa en el hígado puede causar enfermedad hepática no alcohólica (NAFLD), una afección en la que se acumula grasa en el hígado. La NAFLD puede provocar inflamación y daño en dicho órgano, lo que puede dar lugar a enfermedades hepáticas más graves.

Por eso, aunque la fructosa es una forma natural de azúcar, es importante controlar su consumo y limitar la ingesta de alimentos procesados con alto contenido de fructosa. 

Desde Unika recordamos que una dieta saludable debe incluir una variedad de alimentos, como frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras, y limitar los alimentos procesados con alto contenido de azúcar y calorías.

Además, os damos un tip relevante: leer las etiquetas de los alimentos y buscar alimentos que no contengan HFCS. Nuestro consejo es, en su punto, buscar productos con edulcorantes naturales, como miel o jarabe de arce. Si bien estos edulcorantes también contienen fructosa, se consumen en cantidades mucho menores que los alimentos procesados con alto contenido de HFCS.

Resumiendo, aunque la fructosa es una forma natural de azúcar, es considerable consumirla con moderación. También elegir alimentos saludables en lugar de alimentos procesados con alto contenido de la misma. Con un enfoque en una dieta equilibrada y nutritiva, se puede disfrutar de sus beneficios sin poner en riesgo la salud. En Unika queremos que conozcas este tipo de componentes alimenticios, y te invitamos a descubrir más. Te animamos a seguir nuestro blog, donde informamos mensualmente de distintos ingredientes del mercado.

Qué debes saber del queso

Qué debes saber del queso

El queso es un alimento que ha formado parte de la dieta humana desde hace miles de años. Es uno de los productos lácteos más antiguos y populares en todo el mundo. Se utiliza en una variedad de platos y preparaciones culinarias. Sin embargo, hay mucho más detrás de lo que se ve a simple vista. En Unika, gestión de marcas, nos preocupamos por la seguridad alimentaria. Por eso hablaremos sobre todo lo que debes saber sobre él.

 

Qué es el queso

Es un producto lácteo elaborado a partir de la leche de vaca, cabra o oveja. Hay varias teorías sobre su origen, pero ninguna ha sido demostrada. Muchas de ellas coinciden en la idea de que proviene del Oriente Medio —concretamente del templo de la diosa de la vida Ninhursag en Mesopotamia—. Allí ya se comenzó a elaborar queso de leche de vaca y cabra. 

 

Clasificación de los quesos

Los quesos se clasifican según su contenido de humedad, textura y proceso de elaboración. Los frescos tienen un alto contenido de humedad y una textura suave, mientras que los curados tienen menos humedad y una textura más firme. Los quesos duros, como el parmesano, son quesos curados que han sido rallados y tienen una textura muy firme. Los añejos son quesos curados que han sido madurados durante un período prolongado de tiempo.

Proceso de elaboración de los quesos

La elaboración de los quesos es un proceso complejo que varía según el tipo. En general, el proceso comienza con la pasteurización de la leche, que se somete a un proceso con el que se busca matar cualquier bacteria potencialmente peligrosa. A continuación, se añade un cultivo específico de bacterias o una sustancia química conocida como «cuajo» para coagular la leche y se mezcla con ella. El resultado es una masa coagulada, que se divide en cuajada y suero. La cuajada es el queso, mientras que el suero es un líquido que se utiliza para otros productos lácteos. El queso se moldea y se madura durante un período de tiempo determinado, que varía según el tipo de queso.

 

Nutrición del queso

Este alimento es una buena fuente de proteínas y calcio, pero también contiene una gran cantidad de grasas y sodio. Es importante controlar el consumo de queso, especialmente para aquellos que intentan controlar su ingesta de grasas y sodio. Sin embargo, también hay opciones de queso bajo en grasa y sodio disponibles en el mercado. Además, algunos quesos, como el queso azul, también contienen probióticos, lo que puede ser beneficioso para la salud digestiva.

 

Tipos de queso populares

Hay una gran variedad de quesos disponibles en el mercado, cada uno con su propio sabor y textura únicos. Algunos de los quesos más populares incluyen cheddar, gouda, mozzarella, brie, queso azul y parmesano. Cada uno de estos quesos se utiliza en diferentes preparaciones culinarias y se combina bien con diferentes tipos de vino y cerveza.

 

Almacenamiento y servicio del queso

El almacenamiento adecuado de este producto es esencial para preservar su sabor y textura. El queso debe guardarse en un lugar fresco y húmedo, como una nevera, y se debe cubrir con papel pergamino o film plástico para evitar que se seque. Además, el queso debe servirse a temperatura ambiente para que su sabor y textura sean óptimos.

En resumen, el queso es un alimento versátil y delicioso que ha formado parte de la dieta humana desde hace miles de años. Es importante comprender su proceso de elaboración, clasificación, nutrición y almacenamiento para disfrutarlo al máximo. 

En nuestros procesos para salvaguardar la seguridad alimentaria somos conscientes de la importancia de hacer llegar al consumidor una información legal y veraz, así como ofrecer la seguridad de que todos los productos cumplen los estándares obligatorios.

¿Cuál es tu queso favorito?

¿Qué son los carbohidratos?

En UNIKA, Gestión de Marcas, sabemos la importancia de seguir una alimentación saludable, por eso en esta entrada vamos a hablar sobre qué son los carbohidratos, para qué son necesarios y cuántos carbohidratos se deben de consumir.

¿Qué son los carbohidratos?

Los carbohidratos son uno de los tres grupos de macronutrientes esenciales que necesitamos en nuestra dieta, junto a las proteínas y grasas. Los carbohidratos se encuentran en una amplia variedad de alimentos, incluyendo frutas, verduras, panes, cereales, arroz, pastas y legumbres.

Estos se dividen en dos categorías principales: simples y complejos. Los carbohidratos simples se digieren rápidamente y proporcionan energía inmediata. Se encuentran principalmente en alimentos dulces y procesados, como pasteles, chocolates y bebidas azucaradas. Los carbohidratos complejos, por otro lado, se digieren más lentamente y proporcionan energía a largo plazo. Se encuentran en alimentos integrales y sin procesar, como frutas, verduras, granos enteros y legumbres.

Existen diferentes tipos de carbohidratos, que se clasifican según su estructura química y su función en el organismo. Algunos de los principales tipos son:

  • Monosacáridos: Los monosacáridos son carbohidratos simples que se digieren rápidamente y se absorben directamente en el intestino. Los principales monosacáridos son la glucosa, la fructosa y la galactosa.
  • Disacáridos: Los disacáridos son carbohidratos formados por la unión de dos monosacáridos. Los principales disacáridos son la sacarosa (azúcar de mesa), la lactosa (azúcar de la leche) y la maltosa.
  • Polisacáridos: Los polisacáridos son carbohidratos complejos formados por la unión de muchos monosacáridos. Los principales polisacáridos son el almidón, que se encuentra en los cereales, las patatas y otros vegetales, y la celulosa, que es un componente importante de las plantas.
  • Fibra: La fibra es un tipo de carbohidrato que no se digiere y no proporciona energía al cuerpo. Sin embargo, la fibra es importante para la salud del sistema digestivo y puede ayudar a controlar el peso y prevenir enfermedades como la diabetes y enfermedades cardíacas.

Hay que tener en cuenta que no todos son iguales y que es necesario incluir variedad en la dieta para obtener todos los nutrientes necesarios.

¿Por qué necesitamos los carbohidratos?

Son importantes porque proporcionan energía al cuerpo. Cuando comemos alimentos que los contienen, nuestro cuerpo los convierte en glucosa, que es una forma de energía que nuestras células pueden utilizar para funcionar correctamente.

Además de proporcionar energía, los carbohidratos también tienen otras funciones importantes en el cuerpo. Por ejemplo, los carbohidratos complejos pueden ayudar a controlar el peso y a mantener los niveles de azúcar en la sangre estables. También pueden ayudar a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes y las enfermedades cardíacas.

¿Cuántos debemos consumir?

La cantidad de que debemos consumir varía según nuestras necesidades individuales, pero en general, la mayoría de las personas necesitan consumir alrededor de un 45-65% de sus calorías totales a través de carbohidratos. Es importante elegir los que sean de alta calidad, como frutas, verduras, granos enteros y legumbres, en lugar de alimentos procesados y dulces.

En resumen, en UNIKA Gestión de Marcas, abogamos por una dieta equilibrada con un patrón de alimentación que incluya una variedad de alimentos de todos los grupos alimenticios en proporciones adecuadas y suficientes para satisfacer las necesidades nutricionales del cuerpo y proporcionar energía suficiente para llevar a cabo actividades diarias.

 

microbiología de los alimentos

La microbiología de los alimentos, qué debes saber

La microbiología de los alimentos es una ciencia que examina los microorganismos que se encuentran en los alimentos y que pueden causar enfermedades. Los microorganismos que se encuentran en los alimentos pueden ser bacterias, hongos o virus. La mayoría de estos microorganismos son inofensivos y, de hecho, algunos son útiles en la producción de alimentos, como en la elaboración de quesos y yogures. Sin embargo, otros de esos microorganismos pueden causar enfermedades, como la salmonella y la toxoplasmosis.

 

microbiología de los alimentos

Está demostrado que los microorganismos se encuentran en todas partes, incluidos los alimentos. Los alimentos que han sido manipulados por el hombre, como el pan, la carne y el queso, pueden estar contaminados con bacterias, pero aquellos que no han sido, como las verduras, también lo pueden estar. Esto es debido a que la contaminación puede ocurrir en cualquier momento durante la producción, el transporte o el almacenamiento de los alimentos.

Los alimentos se pueden contaminar de muchas maneras. Por ejemplo, las bacterias pueden contaminar los alimentos si se encuentran en el agua que se utiliza para lavarlos o en los utensilios que se utilizan para manipularlos. También los virus y los hongos pueden contaminar los alimentos sin necesidad de contacto directo con los mismos, simplemente si se encuentran en el aire.

Los microorganismos pueden multiplicarse rápidamente en los alimentos, especialmente si están en un ambiente cálido y húmedo. Además, la contaminación de los alimentos con bacterias puede ser peligrosa, ya que algunas bacterias pueden causar enfermedades. Esto ocurre por ejemplo con la salmonella. Es una bacteria que puede contaminar los alimentos y causar diarrea, vómitos y fiebre. O también con la toxoplasmosis, que es una enfermedad causada por un parásito que se encuentra en los alimentos contaminados con tierra o excrementos de gatos.

 Las personas pueden contaminar los alimentos, por ejemplo al tocarlos si no se lavan las manos con agua y jabón después de ir al baño, después de manipular otros alimentos o si no se lavan los utensilios de cocina correctamente. Para evitar que esto ocurra, es importante seguir unas pautas de higiene adecuadas. 

Una de las mejores formas de evitar la contaminación de los alimentos es cocinarlos adecuadamente. La mayoría de las bacterias y virus mueren cuando se cocinan los alimentos. Otra forma de desinfectar los alimentos es con la utilización de productos químicos. Los desinfectantes más comunes son el cloro y el alcohol. Si se elige esta opción hay que seguir las instrucciones del fabricante para utilizar dichos productos de forma segura.

En Unika Gestión de Marcas podemos garantizar que la elaboración de tus productos sea de la más alta calidad y con unos estándares de higiene y seguridad alimentaria óptimos. Consúltanos y te asesoraremos.

Qué es la inocuidad de los alimentos

En Unika, gestión de marcas, nos preocupamos por la seguridad alimentaria, ya que esto es fundamental en nuestra actividad. Por eso es importante conocer qué es la inocuidad de los alimentos.

La inocuidad en la seguridad alimentaria es una disciplina científica que describe el manejo, la preparación y el almacenamiento de alimentos de manera que se prevengan las enfermedades transmitidas por alimentos. Es decir, la inocuidad de los alimentos se refiere a la seguridad de los alimentos en cuanto a su potencial para causar enfermedad. 

Este amplio concepto trata de abarcar todos los aspectos de la producción, manipulación, embalaje, almacenamiento, transporte, distribución y comercialización de los alimentos. La inocuidad de los alimentos es una responsabilidad compartida por todos los actores de la cadena de suministro de alimentos, desde los agricultores y los productores hasta los restaurantes y los consumidores.

La seguridad de los alimentos es una preocupación creciente en todo el mundo. Cada año, se estima que más de 200.000 personas mueren por enfermedades relacionadas con los alimentos. Los alimentos contaminados con bacterias, virus, parásitos o toxinas pueden causar enfermedades graves, a veces mortales. La contaminación de los alimentos puede producirse en cualquier punto de la cadena de suministro de alimentos, desde la granja hasta la mesa del consumidor.

La mejor manera de protegerse contra la contaminación de los alimentos es seguir unas buenas prácticas de higiene y manipulación de los alimentos. Los restaurantes y otros establecimientos de comida deben seguir estrictas normas de higiene y manipulación de los alimentos para evitar la contaminación cruzada. Por otro lado, los consumidores deben cocinar los alimentos de manera adecuada y evitar el contacto entre los alimentos crudos y cocinados.

Por ejemplo, lavarse las manos, especialmente después de manipular alimentos crudos, es una de las mejores maneras de prevenir la contaminación de los alimentos. Otras medidas que pueden ayudar a prevenir la contaminación de los alimentos incluyen la separación de los alimentos crudos y cocinados, el lavado de los utensilios de cocina y el refrigerio de los alimentos en los establecimientos de comida.

Lo cierto es que la inocuidad de los alimentos es un problema complicado que requiere la colaboración de todos los actores de la cadena de suministro de alimentos. Los agricultores, los productores, los restaurantes, los reguladores y los consumidores deben trabajar juntos para garantizar que los alimentos que se producen, manipulan y se venden estén libres de contaminantes.

Qué es la inocuidad de los alimentos

Entonces, ¿cómo ayudar a mantener la inocuidad de los alimentos? 

Para mantener la inocuidad de los alimentos, se recomienda seguir las siguientes pautas: 

  1. Lavar las manos: es esencial lavarse las manos con agua y jabón durante 20 segundos antes de manipular los alimentos y después de ir al baño o tocar otras superficies.
  2. Separar los alimentos: evitar que los alimentos crudos entren en contacto con los alimentos cocinados o listos para comer.
  3. Cocinar los alimentos: asegurarse de cocinar los alimentos hasta la temperatura adecuada para matar cualquier bacteria presente.
  4. Refrigerar los alimentos: los alimentos deben refrigerarse rápidamente para evitar que las bacterias se multipliquen. Los alimentos deben mantenerse por debajo de 40°F (4°C).
  5. Congelar los alimentos: los alimentos congelados mantienen.

En UNIKA, Gestión de Marcas, estamos especializados en ayudar a las empresas a gestionar este tipo de cuestiones sanitarias. Si necesitas asesoramiento en tu empresa, contacta con nosotros y nuestro personal buscará la mejor manera de ayudaros.

¿Qué es el control microbiológico?

El control microbiológico es el proceso mediante el cual se pueden detectar, identificar y cuantificar microorganismos en una muestra de un producto o del ambiente. También se puede utilizar para evaluar el efecto de un tratamiento microbiológico, como la desinfección o la esterilización. Desde Unika gestión de marcas y expertos en análisis de laboratorios hoy hablamos sobre dicha actividad.

 

¿En qué consiste el control microbiológico? 

El control microbiológico permite identificar, cuantificar y evaluar los microorganismos presentes en un producto o ambiente, y se realiza mediante el uso de técnicas de muestreo y análisis. 

También puede incluir el uso de técnicas de control de la contaminación microbiana. Es decir, incluir diversas pruebas para detectar microorganismos en una muestra.

Estas pruebas pueden incluir la microscopía, la cultivación en medios de cultivo, la prueba de enzimas o la prueba de PCR y el uso de técnicas de control de la contaminación microbiana. 

Además es posible realizar pruebas para evaluar el efecto de un tratamiento microbiológico, como la desinfección o la esterilización.

control microbiológico

 

¿Cómo se recolectan las muestras para el análisis microbiológico?

Las muestras para el análisis microbiológico se recolectan mediante el uso de técnicas de muestreo estandarizadas. Las muestras pueden recolectarse de alimentos, superficies, equipos, utensilios, ambientes, agua o aire.

Así se aíslan mediante el uso de técnicas de aislamiento estandarizadas, que se utilizan para separar los microorganismos de la muestra y permitir su identificación y cuantificación.

 

¿Cuáles son los tipos de análisis microbiológicos?

Los tipos de análisis microbiológicos incluyen la identificación de microorganismos, la cuantificación de microorganismos, la evaluación de la actividad microbiana, la evaluación de la resistencia a antimicrobianos y la identificación de toxinas microbianas.

La identificación de microorganismos utiliza técnicas para determinar qué microorganismos están presentes, y la cuantificación de las mismas lo que hace es determinar la cantidad de microorganismos presentes en dicha muestra. 

Asimismo, la evaluación de la actividad microbiana implica el uso de técnicas para evaluar la capacidad de un microorganismo para multiplicarse y/o producir toxinas. La evaluación de la resistencia a antimicrobianos lo que hace es evaluar la capacidad de un microorganismo para resistir el efecto de un antimicrobiano; y la identificación de toxinas microbianas utiliza técnicas para detectar y/o cuantificar las toxinas producidas por microorganismos.

tipos de control microbiológico

 

Entonces, ¿cuándo es necesario un control microbiológico?

Es necesario su realización cuando se sospecha la presencia de microorganismos en una muestra. También se puede realizar un control microbiológico después de un tratamiento microbiológico para asegurarse de que el tratamiento fue efectivo.

 

¿Y qué hay que hacer si en el control microbiológico se detectan elementos externos?

Si en el control microbiológico se detectan elementos externos, es necesario tomar las medidas necesarias para eliminarlos. Esto puede incluir el uso de un tratamiento microbiológico, como la desinfección o la esterilización.

La desinfección o la esterilización son procesos químicos o físicos que se utilizan para eliminar o matar microorganismos en una superficie o una muestra. En la desinfección se utilizan químicos para eliminar microorganismos, mientras que en la esterilización se utilizan altas temperaturas o radiación para matar microorganismos. Dependiendo de la naturaleza de los elementos externos, se debe seleccionar el método de desinfección o esterilización más adecuado.

Si tienes dudas sobre el método que se debe utilizar para eliminar los elementos externos, consulta a UNIKA Gestión de Marcas. Un especialista en control microbiológico te asesorará para elegir el mejor proceso.

conservante

5 conservantes que debes evitar 

En Unika, gestión de marcas, hemos hecho una selección de 5 conservantes que debes evitar. Nuestra principal preocupación es que los productos que se utilicen diariamente cumplan las necesidades de seguridad para el consumidor.

Sin darnos cuenta, consumimos productos que no son beneficiosos para nuestra salud. En su elaboración, se utilizan conservantes químicos, que son compuestos añadidos a los alimentos y otros productos para prolongar su vida útil. 

 

maquillaje conservante

Muchos de estos químicos utilizados son tóxicos y pueden causar problemas de salud. Algunos de los más habituales, sobre todo en cosmética y maquillaje, tienen ingredientes tóxicos y químicos nada aconsejables por distintos motivos.

¿Qué conservantes debemos evitar?

Algunos de los conservantes químicos que debes evitar son los parabenos, sulfatos, ftalatos, propilenglicol y alcohol.

Estos cinco conservantes que hay que evitar son muy comunes, ya que se encuentran en diferentes productos.

  1. Parabenos. Los parabenos son conservantes comúnmente usados en cosméticos y productos para el cuidado de la piel. Se usan para prolongar la vida útil de los productos al prevenir el crecimiento de bacterias y hongos. Sin embargo, se ha demostrado que los parabenos pueden ser absorbidos a través de la piel y tienen efectos hormonales en el cuerpo. Los estudios también han relacionado los parabenos con el cáncer de mama.
  2. Ftalatos. Son un grupo de químicos usados ​​comúnmente como plastificantes en muchos productos de plástico, como juguetes, envases de alimentos y cosméticos. Pueden ser tóxicos para el hígado, los riñones y el sistema reproductivo. Los ftalatos se han relacionado con problemas de salud. Como problemas reproductivos, cáncer de testículo y problemas del desarrollo del sistema reproductivo.
  3. BHA y BHT. Se encuentran en muchos alimentos y cosméticos, y son tóxicos para el hígado.
  4. Sulfatos. Ingrediente comúnmente usado en jabones, champús y otros productos de limpieza. Así como en cosméticos. Pueden ser irritantes para la piel, los ojos y las mucosas. Se usan para producir espuma y ayudar a limpiar la piel o el cabello. Sin embargo, además de influir en el ph de la piel y el cabello, pueden deshidratar la piel.
  5. Propilenglicol. Se utiliza comúnmente en la industria de cosméticos. Principalmente en lociones y cremas para humectar la piel. Se agrega a los productos de belleza para ayudar a disolver otros ingredientes y también se utiliza como un agente humectante. Además lo podemos encontrar en productos farmacéuticos y alimentarios. Utilizándose como sustancia emulsionante. Lo podemos encontrar en alimentos para animales, pero también se utiliza en la fabricación de látex, líquido de frenos, líquido de enfriamiento y líquido de limpieza. Por tanto, es mejor evitarlo en nuestro día a día.

Estos son los 5 conservantes que debes evitar y que se encuentran habitualmente en muchos productos. Desde Unika, gestión de marcas, aconsejamos que, antes de comprar un producto, leas con detenimiento sus ingredientes. No es necesario que hagas un análisis exhaustivo de los alimentos o cosméticos, pero sí una lectura rápida de sus componentes para evitar estos conservantes, ya que su uso dilatado en el tiempo puede llegar a ser perjudicial para nuestra salud. 

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Frutas y verduras de temporada. Guía para la estación de primavera

Saber elegir las frutas y verduras de cada temporada es importante para disfrutar de una buena alimentación. Por eso en el post de hoy te contamos qué alimentos corresponden a la estación de primavera.

Esta empieza el 20 de marzo y finaliza el 21 de junio. Y durante estos tres meses, encontramos diversas frutas y verduras con múltiples beneficios y propiedades. Consumir estos alimentos en su temporada, es la mejor forma de aprovechar todos sus nutrientes y beneficios para la salud. Por esa razón desde Unika, empresa dedicada a la gestión de marcas, os dejamos una guía práctica para identificar las frutas y verduras de la temporada de primavera.

 

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Guía de alimentos por meses

  • Marzo

Gran parte de este mes transcurre dentro de la estación invernal. Por lo que hasta el 20 de marzo, conviven a la vez frutas y verduras invernales y estivales. 

Frutas: Fresa, fresón, kiwi, manzana, mandarina, naranja, pomelo, plátano, aguacate, limón

Verduras: Alcachofa, espárrago, brócoli, apio, ajo, col, acelga, lombarda, coliflor, puerro, endibia, lechuga, escarola, remolacha, cebolla, cardo, espinaca, zanahoria

  • Abril

En el mes de abril entramos de lleno en la estación primaveral. Esto se ve reflejado en las horas de luz, el buen tiempo y en la aparición de alimentos como el kiwi o el níspero. 

Frutas: aguacate, fresón, mandarina, kiwi, limón, naranja, pomelo, níspero

Verduras: acelga, alcachofa, apio, cebolla, col lombarda, coliflor, espárrago, brócoli, endibia, espinaca, zanahoria, remolacha, lechuga, escarola, col.

  • Mayo

Durante mayo, la lista de frutas y verduras sigue en aumento. Es conveniente aprovechar este mes para disfrutar de todos estos alimentos ya que en cuanto empiece el calor veraniego, algunos de ellos desaparecerán.

Frutas: aguacate, albaricoque, frambuesa, ciruela, cereza, fresa, limón, níspero, naranja, nectarina, plátano, melocotón, pomelo.

Verduras: acelga, ajo, alcachofa, apio, brócoli, cebolla, endibia, espárrago, espinaca, remolacha, lechuga, rábano, judía verde, zanahoria.

  • Junio

La cuenta atrás para el verano empieza en el mes de junio. En cuestión de días la primavera deja paso a la temporada estival. Por lo que ya se empiezan a encontrar frutas y verduras más jugosas y ricas en agua. Tan necesarias para las altas temperaturas veraniegas.

Frutas: albaricoque, breva, cereza, ciruela, frambuesa, fresa, sandía, melocotón, melón, mora, nectarina, níspero, paraguayo, pera, plátano, limón.

Verduras: acelga, ajo, alcachofa, apio, brócoli, calabacín, cebolla, endibia, espinaca, judía verde, lechuga, pepino, pimiento, rábano, remolacha, tomate, zanahoria.

 

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La alimentación juega un papel fundamental en la salud y bienestar personal. Por eso desde Unika Gestión de Marcas, esperamos que este post te haya resultado útil para identificar las frutas y verduras de la temporada de primavera. Y que te haya animado a consumirlas durante esta estación. ¡Recuerda consultarlo la próxima vez que vayas a hacer una compra!

desperdicio

Cómo reducir el desperdicio de alimentos

La basura es un lugar muy revelador para hacernos una idea del desperdicio de alimentos presente en nuestra sociedad. Y es que, este, es sin duda uno de los grandes problemas medioambientales de nuestra era. Esta práctica contribuye a las emisiones de gases de efecto invernadero y desperdicio de agua y otros recursos necesarios para cultivar alimentos.

Los principales responsables de la contaminación medioambiental son las grandes empresas pero aun así nosotros como individuos tenemos un papel muy importante en la reducción del desperdicio alimentario. Por este motivo hoy, desde Unika, empresa dedicada a la gestión de marcas, compartimos con vosotros diferentes formas para reducir esto a lo largo del día.

 

seguridad alimentaria

15 consejos para reducir el desperdicio de alimentos

  • Adoptar una dieta más saludable y sostenible

Esta conducta alimentaria es beneficiosa tanto para las personas como para el medio ambiente, además de no requerir tanta elaboración como pensamos. La vida se mueve deprisa, y preparar comidas nutritivas puede ser complicado, pero las comidas saludables no tienen porqué ser elaboradas. En internet abundan recetas saludables y rápidas que pueden compartir con sus familiares y amigos

  • Comprar solo lo que es necesario

Planificar la comida, realizar un menú semanal y preparar una lista de la compra para evitar compras compulsivas puede ser de gran ayuda, tanto para el desperdicio de alimentos como para su bolsillo.

  • Aprovechar las frutas y hortalizas que tienen una apariencia diferente al resto

No se debe juzgar a los alimentos por su apariencia. A menudo se tiran a la basura frutas y hortalizas magulladas o con formas extrañas porque incumplen normas cosméticas arbitrarias y pensamos que están malas. No hay de qué preocuparse porque el sabor es el mismo. Incluso si estas están demasiado maduras se pueden utilizar para algunas recetas en concreto. Por ejemplo, cuando la fruta está un poco pasada la podemos utilizar para batidos, zumos y postres.

  • Almacenar los alimentos con sensatez.

Cuando compramos alimentos debemos pensar en la manera de almacenarlos para evitar que se desperdicien. Ordenar los alimentos a la hora de almacenarlos es muy efectivo, por ejemplo proponemos poner los más antiguos en la parte delantera del armario o frigorífico y colocar los nuevos en la parte trasera. Otras acciones para prevenir pueden ser utilizar recipientes herméticos para mantener los alimentos abiertos frescos en el frigorífico o asegurarnos de cerrar los paquetes para que no entren insectos.

  • Comprender el etiquetado de los alimentos

Existe una gran diferencia entre las fechas de “consumo preferente” y la “caducidad”.  A veces los alimentos siguen siendo válidos para el consumo pasada la fecha de “consumo preferente”, mientras que la fecha de “caducidad” indica el momento en que el consumo deja de ser válido ya que puede ser dañino para la salud.  También comprender el etiquetado de los alimentos sirve para averiguar si contienen ingredientes no saludables como grasas trans y / o conservantes.

  • Empezar por lo pequeño

Servir en casa porciones más pequeñas o compartir platos más grandes en los restaurantes.

  • Valorar las sobras

alimentos

Si no se come todo lo que se prepara, congelarlo para más adelante o utilizar las sobras como ingrediente de comida puede ser acciones beneficiosas contra el desperdicio de alimentos.

  • Hacer uso de los alimentos desperdiciados (Abono)

desperdicio alimentos

En lugar de tirar a la basura desechos de comida, haga compost con ellos , es decir abono, para de esta forma devolver los nutrientes al suelo y reducir su propia huella de carbono.

  • Respetar los alimentos 

Es positivo aprender sobre los procesos de producción y conocer más allá del trabajo de aquellos agricultores cercanos.

  • Apoyar los productores de alimentos locales

Comprando productos locales, prestamos apoyo a agricultores familiares y pequeñas empresas de su comunidad. Luchando también contra la contaminación reduciendo las distancias que recorren los camiones y otros vehículos en el reparto.

  • Mantener la seguridad de las poblaciones de peces

Debemos consumir mayoritariamente aquellas especies de peces que abundan más, como la caballa o el arenque, antes que otras que corren peligro de sobreexplotación, como el bacalao o el atún. También intentar comprar pescado que se ha capturado o criado de forma sostenible, como el pescado provisto de etiqueta o certificado ecológico.

  • Usar menos agua

No podemos producir alimentos sin agua por lo que es importante ahorrar también en todos los recursos hídricos empleados en su producción. 

  • Mantener limpios los suelos y agua

Algunos desperdicios domésticos son, en potencia, peligrosos y nunca deben echarse a un cubo de basura general. Artículos como pilas, pintura, teléfonos móviles, medicamentos, productos químicos, etc. Pueden llegar a filtrarse en el suelo y en el suministro de agua, perjudicando así los recursos naturales con los que se producen nuestros alimentos.

  • Comer más legumbres y verdura

alimentos

Tratar de consumir una vez por semana una comida a base de legumbres o cereales “antiguos” como la quinoa, garbanzos… Además esto contribuirá a mejorar nuestra salud y bienestar

  • Compartir es cuidar

Donar los alimentos que de otro modo se desperdician. Como por ejemplo existen aplicaciones donde las cafeterías, fruterías, restaurantes,… venden packs con la comida sobrante del día , si usamos estas aplicaciones rescatamos alimentos siendo de esta manera sostenibles con el medioambiente y nuestros recursos.

Estos son tan sólo algunos de nuestros consejos para evitar el despilfarro de alimentos. Pero seguro que hay muchos más, ¿cuál es tu truco para evitarlo? Desde Unika, gestión de marcas, te animamos a que nos compartas tus trucos y así hacer de este mundo uno más sostenible. ¡Te leemos en comentarios!

análisis

Qué aportan las legumbres en tu dieta y por qué son tan importantes

El 10 de febrero es el Día Mundial de las Legumbres. Alimento base en toda dieta equilibrada, Por ello hoy, desde Unika Gestión de Marcas, expertos en el análisis y seguridad de alimentos, te hablamos por qué son tan importantes y debes incluirlas siempre en tu alimentación.

 

Cada vez más, estamos concienciados en la importancia de una alimentación sana y equilibrada, que nos dé todos los nutrientes necesarios. Este es uno de los alimentos más completos y necesarios que deben estar presentes en nuestro día a día, te explicamos por qué.

legumbre

 

¿Qué son las legumbres?

 

Las legumbres son un tipo de leguminosas que se cosechan para obtener una semilla seca, como lo son las lentejas, garbanzos o judías, por ejemplo.

Se trata de cultivos esenciales por diversas razones. Y es que están repletos de nutrientes con un alto contenido en proteínas, por lo que son perfectas para aquellas dietas vegetarianas por ejemplo o veganas. 

Las legumbres son bajas en grasas y ricas en fibra soluble, es decir ayudan a reducir el colesterol y controlar el azúcar en sangre. Por lo que son perfectas para enfermedades como la diabetes o dolencias cardíacas. Además de ayudar a combatir la obesidad, enfermedad con altos números en nuestra sociedad.

Estos cultivos tienen grandes propiedades fijadoras de nitrógeno, por lo que ayudan a mejorar la fertilidad del suelo. Aumentan la productividad de las tierras de cultivo, promoviendo la biodiversidad agrícola y del suelo. Llegando incluso a mantener a raya las plagas y enfermedades nocivas. 

Las legumbres pueden incluso contribuir a la mitigación del cambio climático, pues pueden ayudar a reducir la dependencia de los fertilizantes sintéticos utilizados para aportar nitrógeno al suelo. 

seguridad

¿Qué nos aportan las legumbres?

 

Las legumbres tienen aproximadamente el doble de proteínas que podríamos encontrar en cereales como el trigo, por lo que para aquellas regiones donde es complicado obtener carne o lácteos es vital.

Destacamos su alto contenido en minerales y vitaminas, ideales, como hemos mencionado anteriormente, para aquellas dietas veganas o vegetarianas, pues aseguran una ingesta suficiente de nutrientes esenciales. 

 

Gracias a su alto contenido en hierro y fibra facilitan el transporte de oxígeno a todo el organismo, así como a eliminar toxinas y colesterol del organismo, pues favorece el tránsito intestinal.

 

Según la FAO, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura, las legumbres cuentan con grandes valores nutricionales:

 

  1. Bajas en grasas y sin colesterol que, unido a su alto contenido en fibra, ayudan a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, mejorando la salud digestiva.
  2. No contienen gluten, por lo que son aptas para personas celíacas. 
  3. Perfectas para personas con diabetes o que quieran controlar su peso pues ayudan a estabilidad el azúcar en sangre, así como los niveles de insulina
  4. Fuente de folato. Un tipo de vitamina B esencial para el sistema nervioso y muy importante durante el embarazo para prevenir anomalías en el feto.
  5. Ricas en hierro, que mejoran la absorción de este si se combinan con alimentos ricos en vitamina C.
  6. Ayudan a prevenir la disminución cognitiva y reducir los síntomas menopáusicos, además de mejorar la salud ósea.
  7. Fuente de proteínas vegetales, pudiéndose aumentar combinándolo con cereales. 

 

Es importante que estos alimentos siempre se cocinen, pues no deben tomarse crudos. Es recomendable remojarlas en agua en caso de ser legumbres secas durante al menos 4 o 7 horas en función del tipo de legumbres que sean, pues de esta forma se activan sus enzimas. Además de reducir su tiempo de cocción y de facilitar su digestión para que el organismo pueda absorber mejor sus nutrientes. 

legumbres

Por ello, las legumbres son un bien tan preciado e incluso rey de las cocinas, pues además de ser un alimento muy completo y apto a cualquier tipo de alimentación, se trata de un tipo de cultivo que cuida del medio ambiente.

En Unika somos especialistas en el análisis de productos alimenticios. Por ello no dudes en consultarnos cualquier duda sobre ello. ¡Estaremos encantados de ayudarte!

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